lunes, 3 de marzo de 2014

Estilo de vida que dure para siempre

En mi niñez fui muy delgada pero en la adolescencia comencé una lucha de nunca acabar con mi sobrepeso, al punto de llegar hace dos años a pesar 92 kilos (202 libras) y con una estatura de 1.52 metros (5 pies) estaba en un descontrol total, mi deseo de convertirme en madre por segunda vez, me llevo al médico y me dijo que yo no podría embarazarme con ese peso, por mis problemas de presión alta. Eso me llevó donde una nutrióloga y a luchar nuevamente con el peso, dietas, ejercicios. Lo más que pude conseguir fue bajar 8 kilos (17.6 libras), pero en cuanto dejaba la dieta y los ejercicios los volvía a recuperar. Hace 7 meses ya en la desesperación encontré un nuevo nutriologo con un régimen que prometía no pasar hambres, no tener que hacer ejercicios, terapia de auriculoterapia y un día libre a la semana para comer lo que quisieras y lo mejor sin rebotes. Dude un poco de este régimen y mucho más de los balines, los cuales sigo dudosa a decir verdad. Pero decidí intentar una vez más y me dije a mi y al nutriólogo que sería la última dieta que haría en mi vida y sino funcionaba entonces viviría resignada con el peso y cuerpo que me tocó. Él me prometió que sería la última y que tendría un peso saludable.

Hay que tener en cuenta que es mejor un peso saludable que el dichoso peso ideal de las tablas, no todas podemos pesar 55 kilos (121 libras) todo depende mucho también de la forma de tu cuerpo y del tamaño de tus huesos, así que digamos que yo me sentiré muy a gusto con 65 kilos (143 libras), un peso que creo nunca he tenido. 

Regresando a la dieta, hace 7 meses la comencé, el primer mes bajé 4.5 kilos (9.9 libras) nada mal, pero me tuve que ir de viaje y me fui por 6 semanas a visitar a mi mamá en Puerto Rico, comí todo lo que pude, hacía casi dos años no iba a mi tierra, extrañaba su comida. Regresando fui con el nutriólogo nuevamente resignada a que me dijera que había recuperado todo el peso, pues que creen, que no, no había engordado nada, así que fue una prueba superada sobre este régimen alimenticio.

Y continuamos, he tenido semanas que bajo 2 kilos (4 libras), otras que sólo bajo 500 gramos (1 lb) y otras semanas en las que no bajo nada o peor en unas que aumento 1 kilo (2 lbs) pero continuo con ella, puedo comer hasta quedar satisfecha y voy aprendiendo a combinar los alimentos y hace un par de meses comencé con caminatas suaves por una hora al día. Hoy día puedo decir que he bajado 13 kilos (28.6 lbs) desde que estoy con este nuevo estilo de vida y que estoy a 10 kilos (22 lbs) de llegar a mi meta final, pesar 65 kilos (143 lbs).

No importa que régimen decidas llevar para bajar esos kilos de más, lo más importante es tener constancia y disciplina y saber que no es una dieta, sino un nuevo estilo de vida, es cambiar tus hábitos alimenticios y de ejercicios por completo, es ser una nueva tú.

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